«Usa todos los días las cosas bonitas que tienes, no vale la pena vivir almacenando para ocasiones especiales y ver cada día objetos dañados» (Marie Kondo)
Uno de nuestros sueños más deseados es tener una cocina organizada.
En la mayoría de los casos, nosotras saboteamos este sueño ya que tenemos malos hábitos. Ya sea por pereza, prisa, o inconsciencia vamos creando y acostumbrándonos a malos hábitos que hacen que nuestras cocinas estén desorganizadas todo el tiempo. Eliminar estos malos hábitos es el cambio que tu cocina necesita. Fuente: https://www.revistaad.es
- Dejar el jabón, el estropajo y las toallas de cocina en el fregadero.
- No fregar tan pronto terminas de utilizar la vajilla o los utensilios de cocina.
- Olvidar secar y guardar los utensilios tan pronto los lavas.
- Dejar el fregadero sin limpiar después de fregar y dejar restos en el desagüe.
- Guardar alimentos sin tapar en la nevera.
- No tener lugar designado para cada utensilio en tu cocina.
- Comprar alimentos antes de terminar los que ya tienes.
- Guardar utensilios que no usas. Estos solo están ocupando espacio «por si acaso».
- Seguir utilizando ollas excesivamente deteriorada por el tiempo porque «con ella cocinas mejor«.
- Tener la superficie de trabajo llena de cosas innecesarias. Una cocina vacía da ganas de ponerse a cocinar.
Deja de Guardar por guardar
Tapas. Saca todas las ollas y cosas que lleven tapas. Revisa las ollas y deshazte de las que no tienen tapa. También, deshazte de los que ya no recuperan su color por mucho que los laves.
Ollas y sartenes. Revisa el estado de tus sartenes y ollas. ¿Teflón en mal estado? ¿Zonas quemadas en el fondo? ¿Mangos rotos? Tíralos a la basura o dónalos. Estos pueden suponer un riesgo para la salud.
Utensilios para cocinar. Lo más probable es que tengas utensilios repetidos. ¿Cuántos necesitas? Generalmente, Solo necesitamos uno de cada. Como máximo, puede que necesites un par de paletas de diferente tamaño. No guardes por guardar accesorios de cocina.
Electrodomésticos. ¿Para qué guardas la licuadora, la yogurtera, la máquina para hacer pasta que no usas? Si no los usas, están ocupando un valioso espacio que te servirá para reorganizar tu cocina.
Paños y manoplas deteriorados. Generalmente, al fondo en el cajón se acumulan los trapos más antiguos. Estos tienen algún roto o manchas imposibles de sacar. Es mejor tener 5 paños en condiciones que sequen bien que dos docenas de paños que no funcionan.
Mantén tu cocina organizada con estos pasos
Manteles. Si tienes manteles amarillentos o manchados deshazte de ellos. La mantelería debe estar impecable. Lo que no tiene solución, mejor a la basura. Haz lo mismo con las servilletas.
Tablas de cortar en mal estado. Ya sean de madera o de plástico, tienen una vida útil. Recomendamos tablas de vidrio ya que las de madera o plástico pueden hacer extremado daño a tu salud.
Alimentos que nunca vas a cocinar. Aprovecha y chequea la fecha de vencimiento de tus alimentos. Los otros alimentos que no has cocinado, posiblemente no los vas a cocinar.
Accesorios de repostería que no has usado en 3 años. Tienes moldes, gadgets de lo más variado de pastelerías que no has usado (ni vas a usar). Ármate de valor y regala lo que no vayas a usar.
Recetas. Recopila todas las recetas que andan sueltas y organízalas todas en una caja o carpeta.
Productos de limpieza que no necesitas. Haz inventario de los que necesitas y usas. Luego, deshazte de los demás.
Nevera. Ya mismo, tira de la nevera las bolsas de kétchup y mayonesa que sobran. Estas las traes cuando llevas comida rápida a casa. También, tira los botes de salsas a medio gastar. También deshazte de la huevera de serie que viene en la puerta de la nevera. Está estudiado que es mejor guardar los huevos en la propia nevera, arriba. E incluso en su propia caja porque las bacterias vienen en la cáscara.
Vajillas. Deshazte de platos, tazas y vasos descascarillados. La vida es solo una. Usa todos los días las cosas bonitas que tienes. No vale la pena vivir almacenando para ocasiones especiales y ver cada día objetos dañados.